Como bien explica María La Inglesita en esta entrada, cuando propuso este reto, me tiré de cabeza, como suelo hacer. Estaba impaciente por recibir mi paquete, cuando me llegó vi que el lote que me había tocado era 50 cm. de tela de algodón blanca y 20 cm. de tela de algodón de rayas verdes y blancas.
En el mismo momento que la vi, ya tenía en mente un par de proyectos, la complejidad estribaba en saber si me daba la tela. Una vez comprobado que no, tocaba volver a empezar. Dí muchas vueltas hasta llegar a lo que sería "el proyecto-desastre". Saqué patrón, marqué piezas en tela y corté, sólo me di cuenta del desastre cuando fui a montar lo que iba a ser una túnica, había cortado dos veces la pieza de la espalda y ninguna el delantero y ya no había más tela. Al ser el delantero más ancho que la espalda, era imposible cuadrar, ni a hilo, ni a contrahilo ,ni con superglú. Así que vuelta a empezar, pero ya no tenía 50 cm., ahora tenía varias piezas cortadas.
Lo único que se me ocurrió es hacerle un vestido a la muñeca de mi hija, ya la tela no me daba para más, de hecho sólo me han sobrado unos trocitos de blanco y unas tirillas de las rayas.
Para darle un poco de más gracia a la tela de rayas, puse en práctica algo que llevaba tiempo queriendo hacer, se trata, de la tercera de estas técnicas, que se trata de hacer pespustes por el revés de la tela de forma improvisada, según venga en gana y el resultado, en este caso, da un aspecto "asebrado" ;b
El patrón elegido es el número 6, el Pichi Her Sweetness de la revista Ottobre 4/14. Como tenía que llevar sí o sí costura delantera, debido a mi desastre, decidí ponerle la tira asebrada para darle un toque de color y que no fuese tan soso.
Y hasta aquí mi aportación a Telaria Bee, pasaos por los demás blog y echáis un ojo a las creaciones que han hecho mis compis.